El 16 de noviembre último, una semana antes del balotaje, desde el SiPreBA realizamos un pronunciamiento a través del cual llamamos “al conjunto de los trabajadores y trabajadoras de prensa escrita, radial y televisiva a mantenerse unidos y alertas ante la posibilidad de que los empresarios de medios intenten ejecutar planes de ajuste con la excusa del cambio de gobierno y de escenario político”. Lamentablemente no nos equivocamos. Determinados empresarios de medios buscan aprovechar el contexto de cambio de gobierno para aplicar un ajuste y avanzar sobre los derechos de los trabajadores de prensa y en algunos casos incluso sobre las propias fuentes de trabajo.
Desde diciembre y durante todo el mes de Enero el gremio de prensa, con el SiPreBA a la cabeza, estuvo en la calle defendiendo a los trabajadores en conflicto, principalmente con una inmensa lucha en el Grupo 23 que incluyó movilizaciones, ollas populares y medidas de fuerza como el cese de actividades en Tiempo Argentino y el histórico paro en Radio América. La enorme solidaridad activa de los trabajadores de las mas diversas empresas con los trabajadores de los medios del grupo, puso sobre la mesa que nuestro gremio está mas unido que nunca y que los trabajadores no nos vamos a resignar a ser la variable de ajuste de empresarios que pretenden que paguemos su aventura. Los Szpolski, Garfkunkel y Richarte se enriquecieron durante años con la pauta de los gobiernos nacional y metropolitano así como con la pauta privada, ahora que paguen, con su patrimonio si es necesario, las deudas que tienen con los trabajadores.
La actitud prescindente del ministerio de trabajo, las trabas burocráticas y administrativas que la cartera laboral puso para intervenir en el conflicto, fueron funcionales a la parte empresarial. Los trabajadores seguimos esperando que el ministerio intervenga en este conflicto que es colectivo e inste a los dueños del Grupo 23 a hacerse cargo de las deudas con sus trabajadores. Lo mismo en el caso del Grupo M Deluxe que compró Tiempo Argentino y Radio América: es inviable que un empresario se adueñe de dos medios de comunicación de esa magnitud sin conocer sus deudas y pasivos. Si el dueño Mariano Martínez incumple su promesa de hacerse cargo de los sueldos y garantizar los puestos de trabajo con las condiciones laborales correspondientes (garantizando antigüedad, etc.) el conflicto del Grupo 23 se extiende al Grupo M Deluxe en donde a la fecha hay mas dudas que certezas.
El conflicto del Grupo 23 no es un caso aislado, se da en un contexto general. Los trabajadores de Radio Rivadavia son sometidos a una presión e incertidumbre constante, con amenaza de despidos, pago de sueldos a destiempo, cambio de funciones. 5 trabajadores fueron despedidos en Radio Continental. En Radio Nacional, una gran cantidad de contratos en todo el país, de la parte artística mayoritariamente, fueron dados de baja. Decenas de despidos en DeporTV, entre muchas situaciones inestables y en donde día a día se suman los conflictos.
El gremio de prensa, con el SIPREBA a la cabeza, se mantiene en estado de alerta y movilización, por las fuentes de trabajo, contra los despidos y por nuestras condiciones laborales y profesionales. No hay libertad de expresión si hay incertidumbre sobre el futuro laboral de las y los periodistas y del conjunto de trabajadores de prensa.
Para afrontar momentos y situaciones como éstas es que dimos la pelea para construir un nuevo Sindicato. Acá estamos. En las empresas periodísticas y en las calles, luchando por nuestros derechos.
SIPREBA 28 de Enero de 2016