Rubén Schoffrin, secretario adjunto del Sindicato de Prensa de Buenos Aires, alertó sobre la redolarización de las tarifas en un contexto donde los trabajadores cobran bajos salarios y en pesos y deberán afrontar un inmediato incremento del 203%. Denuncio 1.500 despidos en el sector desde el 10 de diciembre. Exigió la reapertura de las paritarias y la anulación del tarifazo.
Rubén Schofrin, secretario adjunto del Sindicato de Prensa de Buenos Aires, alertó sobre la redolarización de las tarifas en un contexto donde los trabajadores cobran bajos salarios y en pesos y deberán afrontar un inmediato incremento del 203%. Denuncio 1.500 despidos en el sector desde el 10 de diciembre. Exigió la reapertura de las paritarias y la anulación del tarifazo.
Reproducimos la exposición completa del compañero secretario adjunto en la Audiencia Pública desarrollada en la Usina del Arte, del barrio porteño de la Boca:
“Señor Presidente, soy Rubén Schofrin, secretario adjunto del SiPReBA, Sindicato de Prensa de Buenos Aires y delegdo de los rabajadores de prensa y periodistas de Editorial Perfil
Integro a su vez la Mesa Nacional de Trabajadores de Prensa que nucela al 99% de los sindicatos de Prensa de Tdo el país.
Señor presidente: Los trabajadores de prensa -muchos de ellos se encuentran hoy aquí cubriendo esta audiencia- estamos conmocionados por la magnitud del tarifazo en los servicios públicos, ratificado ayer por este aumento del 203 por ciento que ha anunciado el ministro (de Energia, Juan José) Aranguren.
Llegamos aquí con un gobierno que ha violentado las disposiciones de la Corte de discutir en esta audiencia el precio real del gas en boca de pozo.
Lejos de esto, el ministro Aranguren se ha negado abiertamente a dar a conocer cuál es el costo de producción de ese insumo incluso ayer, en su larga exposición de 20 minutos, omitió nuevamente esa información.
En este país, donde emergen a la luz bolsos con millones de dólares escondidos en conventos o aparecen dragones que en vez de echar fuego esconden misteriosas cajas fuertes, o tenemos vicepresidentas de la Nación que denuncian el robo de dinero supuestamente destinado a fundaciones, tenemos un gobierno nacional que mantiene cerrado bajo siete llaves el precio de producción de este insumo.
En este punto, el actual gobierno sigue la tesitura del gobierno anterior, inaugurada con el pacto secreto de Chevron-YPF, un pacto que abrió a redolarización de las tarifas hundidas por el Argentinazo en el año 2001. Y que mantiene actualmente un caracter clandestino a pesar del fallo de la Corte que ordenó al gobierno nacional darlo a conocer.
Entonces, señor presidente, quisiera que se nos responda por qué el ministro Aranguren ha resuelto fijar un precio de venta que arranca el próximo mes en 3 dólares 42 para llevarlo en 2019 a u$s6,78 cuando en la Argentina el costo de producción -se acaba de decir- se sitúa en menos de 2 dólares por unidad calórica.
Nuestro gremio, señor presidente, es un gremio fundado sobre los derechos a las libertades de expresión y de información, cuestiones que no han sido consagradas y han sido violentadas en esta audiencia.
Queremos saber, señor presidente, cuál es la rentabilidad que el gobierno desea fijarle a las empresas energéticas que vienen expoliando a nuestro país desde hace más de dos décadas, con ganancias exorbitantes provenientes de los subsidios que en el día de ayer ni el ministro ni las empresas han mencionado y que jamás fueron reinvertidos en el proceso productivo sino que fueron fugados del país.
Lo concreto, señor presidente, es que el mninistro Aranguren ha anunciado la redolarización de las tarifas públicas con aumentos semestrales del 21%, en dólares, hasta 2019, mientras en este país los trabajadores argentinos cobramos nuestros salarios en pesos.
Se premia, entonces, a las petroleras con un régimen dolarizado de subsidios permanentes a costa del sacrificio de todo el Pueblo argentino.
En nuestro gremio, señor presidente, una burocracia sin representación alguna firmó con las cámaras patronales una de las peores paritarias del país. Como resultado de ello, los trabajadores de prensa y periodistas de esta ciudad nos hemos empobrecido, y esto sin considerar este aumento sideral de tarifas.
Si bien no es motivo de esta audiencia, quiero dejar sentado que los trabajadores de prensa de la ciudad de Buenos Aires hemos sufrido más de 1.500 despidos a lo largo de esta gestión gubernamental. Que no solamente están implicados los 800 compañeros despedidos por el grupo Spolzki sino que en esta situacion se sitúan despidos encubiertos como retiros en el diario Clarín, La Nación y en otras empresas.
Le pregunto entonces, para finalizar, señor presidente, cómo haremos para pagar este aumento inmediato del 200% que pregona como gradual el ministro Aranguren. En un país devastado por salarios que llegan a menos de 10 mil pesos se pretende una dolarización de las tarifas.
Dejo contancia de estas violaciones, exijo la reapertura de las Paritarias y la anulación del tarifazo.”