A 16 años de la represión institucional que asesinó a los dos militantes, Tomás Eliaschev, secretario de Derechos Humanos del sindicato de Prensa de Buenos Aires, aseguró que el 26 de junio de 2002 mostró el poder de los medios de comunicación, para encubrir los crímenes y para revelar la verdad.
El SiPreBA participó de la Jornada en memoria de Maximiliano Kostecki y Darío Santillán, asesinados en la masacre de Avellaneda*
Al dirigirse a la concurrencia congregada en la Estación Darío y Maxi, Tomás Eliaschev recordó que “el 26 de junio no fue un hecho más, fue un hecho que nos marcó a fuego porque en aquellos días vimos qué pueden hacer los medios de comunicación. Por un lado y al principio para encubrir la masacre, para hablar de violencia piquetera, para decir que la crisis había causado dos nuevas muertes; y por otro lado la lucha de los compañeros y las compañeras, reporteros gráficos, del equipo de Canal 7 que estuvo filmando en la estación, que se jugaron para registrar y “dar cuenta en tiempos difíciles”, como decía Rodolfo Walsh”.
El secretario de DDHH del SiPreBA destacó que “fue gracias a la labor de los medios comunitarios y de los trabajadores de prensa honestos y comprometidos con la verdad que se pudo desentrañar la mentira del gobierno de Eduardo Duhalde, que quería hacerle creer a la opinión pública que los piqueteros se habían matado entre ellos”.
Al hacer un balance en perspectiva, el periodista resaltó que el aprendizaje que dejó aquella jornada fue “que lo esencial fue la movilización, la valentía de los movimientos que al otro día volvieron a marchar, y a la semana también volvieron a marchar bajo la lluvia.” Y añadió que “es ese espíritu de lucha el que contagia las redacciones”.
Respecto del presente que atraviesa el gremio, Eliaschev precisó que “hoy estamos dando la pelea contra un gobierno que desde que asumió ya se cobró 3000 puestos de trabajo”.
“Un gobierno que nos quiere precarizar, que nos quiere despedir porque nos quieren calladas y callados, porque a la par que nos despiden también nos cagan a tiros”, denunció.
Al hacer mención de un relevamiento realizado por la secretaría de DDHH del SiPreBA, puntualizó que “el año pasado al menos 45 trabajadores de prensa fueron heridxs con balas de goma y hubo 13 compañeros y compañeras que estaban registrando represiones, que estaban haciendo notas terminaron presos como el compañero de Jujuy que debió pasar la Navidad encerrado por estar con un grabador haciendo entrevistas”.
El dirigente consideró que “es una guerra que están haciendo contra las y los trabajadores de prensa porque quieren silenciarlos. Se cierran medios, se acallan voces. Lo único que quieren es una prensa domesticada”.
Y enumeró que “que en las entrañas mismas del monstruo de la desinformación hay trabajadoras y trabajadores de prensa luchando; trabajadoras y trabajadores de prensa que se sacan una foto diciendo ‘Aparición con vida de Santiago Maldonado’; trabajadores y trabajadoras de prensa que hacen Pañuelazo en las redacciones y cuestionan los contenidos machistas de los medios de comunicación
Para concluir que “estamos dando una pelea que es también por el sentido, porque como trabajadores como trabajadoras de prensa en lucha sabemos que los medios de comunicación tienen que estar en manos de los propios trabajadores”.
Tras 16 años de impunidad y de lucha, el SiPreBA exige cárcel para los responsables políticos de estos crímenes.
Foto: Pepe Mateos