Somos parte de la trayectoria de lucha por un gremio nacional al servicio de los trabajadores. Uno de los puntos a votarse en la Asamblea General del 29 de octubre será la incorporación a la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa. Por Santiago Magrone (Secretario de Relaciones Sindicales)
Somos parte de la trayectoria de lucha por un gremio nacional al servicio de los trabajadores
Por Santiago Magrone (Secretario de Relaciones Sindicales)
Los periodistas-trabajadores de prensa de la Argentina realizaron un extenso e intenso recorrido en su organización como gremio en defensa de sus derechos laborales, asimilable en tiempo y forma al que concretaron otros trabajadores, aportando a la articulación del movimiento sindical en el país, en la región, y a nivel mundial.
De ello da cuenta la participación de hombres y mujeres del periodismo que abrevaron en las mas diversas corrientes de pensamiento –anarquistas, comunistas, trotkistas, radicales, peronistas- con mayor o menor incidencia, aportando al desarrollo de los movimientos sociales, sindicales y políticos de al menos los últimos cien años de la historia del país.
La tarea periodística concebida como un aporte a la información, a la comprensión totalizadora de un hecho o tema, y a la reflexión, nos exige rigurosidad y responsabilidad en el ejercicio de nuestro trabajo, y muchas veces afrontar riesgos ante los poderes constituidos, más o menos visibles, en democracia y en dictaduras.
Un trabajador de prensa no es sólo un operador más o menos eficiente de tecnologías aplicadas a la transmisión de datos, es fundamentalmente un comunicador que investiga, relaciona, informa y opina.
En la historia de la Argentina tenemos registro de gravísimas situaciones atravesadas por hombres y mujeres en el ejercicio de la profesión periodística, sobre todo cuando dicha tarea estuvo asociada al compromiso social y político.
Se cuentan por cientos los casos de censura, despidos, detenciones, desapariciones, asesinatos y exilios padecidos durante la última dictadura cívico-militar padecidos por periodistas, productores de Medios y dirigentes gremiales del sector, en todo el país.
Previo a ello, en 1975, el trabajo periodístico y el sindical en Prensa ya resultaba de alto riesgo. No obstante, de esa fecha datan los últimos convenios de prensa escrita y oral, y de televisión que aún permanecen vigentes, a pesar de los reiterados intentos empresarios por desconocerlos y avasallar los derechos laborales y salariales en la actividad, también definidos en el Estatuto del Periodista Profesional, que rige desde 1946.
Con todo, y particularmente desde 1979, hubo compañeros en todo el país que se dieron a la tarea de resistir y reorganizar paulatinamente la defensa de los trabajadores de prensa desde la base, a través de agrupaciones (COPREPREN, CONATRAP) que procuraban recuperar los sindicatos y sus obras sociales, por esos años intervenidos.
En el AMBA tuvieron un papel destacado activistas enrolados en la Asociación de Periodistas de Buenos Aires y en el Sindicato de Prensa (que luego se unificarían para dar vida a la UTPBA). En el resto del país la tarea recayó principalmente en la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN), que agrupa a organizaciones de primer grado, incluídas las de la Ciudad de Buenos Aires, tengan o no personería gremial.
Reconquistada la democracia en 1983 el ejercicio del periodismo se alivió de los padecimientos sufridos en la dictadura, pero asesinatos como los cometidos contra Mario Bonino y José Luis Cabezas nos refieren que nuestra tarea siempre estará bajo observación desde los poderes económicos y políticos, locales, regionales e internacionales.
En los últimos treinta años el ejercicio de la profesión periodística esta atravesado y condicionado por la creciente concentración de Medios (Diarios, Radios, Televisión, Portales) en unos pocos grupos empresarios, que en Argentina presenta una estructura oligopólica, cada vez más al servicio de esos grupos, y cada vez menos al servicio de una sociedad diversa.
La trabajada Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, aprobada en 2009 y ratificada como constitucional en 2013, sólo tuvo aplicación parcial debido a la dura resistencia presentada por el principal grupo empresario del sector (Clarín), y hoy esta siendo desarticulada por el gobierno nacional.
Las organizaciones nacionales de Prensa (FATPREN y FETRACCOM) y otros sindicatos no enrolados en ellas respaldaron aquella iniciativa, entendida como un aporte a la federalización, a la diversificación del acceso a los Medios, con efecto favorable para todos los actores sociales y para los trabajadores de la comunicación.
Por estos meses de “reconversión de negocios” por parte del sector empresario, afrontamos un fuerte retroceso en materia laboral (multitarea), y salarial (con paritarias a la baja), con pérdida de puestos de trabajo en relación de dependencia, y el aumento de contratos precarios, todo lo cual nos pone, una vez más en la necesidad y en la obligación de consolidar nuestra organización como gremio, junto a todos los sindicatos de prensa del país.
A un año de creación el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) quiere aportar a tal construcción y en ello está trabajando como parte de la Mesa Nacional de Prensa junto a organizaciones hermanas.
En este marco, el SiPreBA (Sindicato Simplemente Inscripto) necesita consolidarse al servicio de los intereses de los compañeros trabajadores procurando dar respuestas adecuadas en materia de derechos laborales, profesionales, salariales (paritarias) y de acción social, y con este objetivo analiza la posibilidad de sumar su afiliación a la FATPREN, sin que ello haga obstáculo a la tarea conjunta con el resto de las organizaciones.
En su Estatuto, esta Federación con personería gremial puede nuclear a trabajadores sindicalizados que integren cooperativas o sistema de cogestión o autogestión comprendidos por la Ley 12908 (Estatuto) y los que trabajan en oficinas de prensa (oficiales y privadas).
La adhesión del SiPreBA a la FATPREN deberá ser decidida por una Asamblea General Extraordinaria de afiliados y su ingreso implicará la participación en la gestión y en las decisiones de la Federación.
Cabe considerar además que la adhesión a la FATPREN conlleva la incorporación de los afiliados del SiPreBA al sistema de prestaciones médico-asistenciales de la Obras Social del Personal de Prensa de la República Argentina, OSPPRA.
La Comisión General Administrativa del SiPreBA convoca a sus afiliados a considerar esta iniciativa y a participar del proceso de toma de decisiones que el Estatuto de la organización contempla. Como siempre, el SiPreBA crece desde el pie.
Buenos Aires, agosto de 2016.