Al tiempo que se silenciaron voces críticas, se controlaron los medios de comunicación y se promovió la concentración de su propiedad. Un caso paradigmático fue el de la entrega de Papel Prensa al Grupo Clarín en el primer tramo de la dictadura cívico-militar iniciada en 1976.
A 43 años del Golpe seguimos levantando las banderas de lucha por un país en donde los trabajadores y las trabajadoras tengamos empleo y salario dignos y la posibilidad de ejercer un periodismo libre de presiones políticas y empresariales.
En la actualidad, en los medios de comunicación vivimos la peor situación desde la vuelta de la democracia. Mas de 3.500 fuentes de trabajo perdidas a través de despidos directos, retiros “voluntarios”, y jubilaciones anticipadas, como consecuencia de achicamientos y cierre de empresas.
El dramático cuadro de situación se completa con un brutal ajuste salarial, con paritarias acordadas a espaldas de los trabajadores en el caso de la prensa escrita y oral de la Ciudad de Buenos Aires, y la violación sistemática de nuestros convenios y estatuto profesional, con la complicidad del gobierno.
La concentración mediática y las presiones de los empresarios y del gobierno hacen cada vez mas difícil el ejercicio con libertad de nuestra profesión y el acceso a información fidedigna, con la consecuente desinformación de la población y el gravísimo deterioro del sistema democrático.
Esto explica también el ataque a los medios alternativos, comunitarios y populares que son excluídos de manera ilegal en las grillas publicitarias y de programación de canales. (por caso Barricada TV y el incumplimiento de artículos vigentes de la ley 26.522).
El cuadro de situación represivo se completa con la violencia ejercida contra los trabajadores de prensa (periodistas-reporteros gráficos-camarógrafos) por parte de fuerzas policiales en situaciones de coberturas en manifestaciones y concentraciones públicas. En particular desde 2017 a la fecha fuimos heridos, detenidos, procesados, y por ello seguimos reclamando a los gobiernos de la Nación y de la Ciudad de Buenos Aires.
Como trabajadores organizados en defensa de los Medios Públicos, de nuestros puestos de trabajo, y de nuestros derechos laborales también nos movilizamos, y también padecimos la represión. Por caso, es lo que ocurrió en diciembre último cuando nos movilizamos frente al CCK (sede del Sistema Federal de Medios Públicos) y fuimos reprimidos con gases y palos por parte de la Policía de la Ciudad mientras reclamamos por la paritaria frente a las oficinas de Hernán Lombardi.
Como SiPreBA enfrentamos con paros, movilizaciones y también en la órbita de la Justicia estos duros y extensos conflictos provocados por funcionarios y empresarios privados (Télam, Radio Nacional, TV Pública, Editorial Atlántida, Pagina 12, entre otros importantes) en los que argumentan crisis para incumplir con los derechos de los trabajadores.
Como sindicato saludamos y agradecemos el acompañamiento de una gran cantidad de sectores sindicales y políticos que nos han respaldado, así como nuestra organización los ha respaldado, en el entendimiento de que nuestra situación se asemeja mucho a la de todos los y las trabajadores, y es parte de una realidad económica y social del país cada vez mas acuciante. Cuestionamos en este sentido la pasividad de la cúpula de la CGT, que se desentiende del reclamo de un plan de lucha formulado por trabajadores y dirigentes de muchos gremios afiliados, y también de otras organizaciones.
Este es el camino, y es por eso que este 24 de marzo volvimos a las calles y continuamos luchando contra la represión y el ajuste, recordando y honrando a los 30 mil compañeros y compañeras desaparecidos.
SiPreBA
Buenos Aires, 24 de marzo de 2019