Al cumplirse el primer aniversario de los despidos ilegales, el Sindicato de Prensa de Buenos Aires acompañará las 6 la concentración frente a la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo y a las 14 la actividad que se llevará adelante a partir de las 14 frente al edificio de la Agencia de Noticias y Publicidad.
Por estas horas y como lo hizo el SiPreBA desde un primer momento, reclamamos -además de la reincorporación de todxs lxs despedidxs- que la justicia resuelva de forma definitiva la situación laboral de las y los trabajadores, pese a que en primera instancia las cesantías fueron anuladas.
Sin embargo, a partir de los intentos del Poder Ejecutivo de intervenir sobre el Poder Judicial, la Cámara del Trabajo «no ha dado una respuesta definitiva y se ha mostrado sensible a las presiones oficiales».
El programa de despidos ideado por la dependencia que encabeza el secretario Hernán Lombardi provocó una de las huelgas más extensas que recuerde el gremio de prensa, con 119 días de paro y permanencia pacífica en los edificios ante la censura practicada bajo la figura del silenciamiento informativo y del ataque directo a las fuentes laborales.
Asimismo, reavivó la cadena de solidaridades de quienes hicieron propia la lucha de las y los trabajadores de la Agencia, al punto de convertirla en un símbolo de las luchas de los sectores populares ante la aplicación de las políticas neoliberales sostenidas a fuerza de hambre y represión.
Ante la permanente embestida sobre los estatutos, convenios y demás logros del movimiento obrero, fortalecemos el abrazo con las centrales de trabajadorxs y todas las organizaciones de la sociedad, atentos a la resolución de esta instancia judicial.
La heroica lucha sostenida por el conjunto de de lxs compañerxs de Télam fue un espejo en el que la clase trabajadora buscó mirarse porque la decisión, determinación y la convicción mostró el camino a seguir ante las maniobras de los sectores empresarios en desmedro de las condiciones y de las fuentes de trabajo.
Se trata de una pelea de fondo en la que se pone en juego el derecho de la población a informarse y a acceder a información plural, veraz y profesional a partir de medios públicos sólidos y robustecidos por la calidad humana y profesional de trabajadores y trabajadoras decididxs a visibilizar y amplificar la voz de los sectores vulnerables de la sociedad, históricamente silenciados desde los poderes de turno.